
Eso (V.O. “It”)
EEUU, 1927
Director: Clarence Badger y Josef von Sternberg (no acreditado)
Guión: Hope Loring, Louis D. Lighton
Intérpretes: Clara Bow, Antonio Moreno, William Austin
Género: Comedia romántica
Argumento
El millonario Cyrus Waltham dirige unos grandes almacenes. Su amigo Monty le visita en su oficina y en un ejemplar de la revista Cosmopolitan encuentra un artículo de su interés, sobre el libro “It” (“Eso”) de la autora Elinor Glyn. “Eso” consiste en un gran magnetismo personal, capaz de ejercer enorme atracción sobre el sexo opuesto. Es un don, algo que se posee de forma natural. Monty se mira en el espejo y piensa que él está dotado con “eso”, mientras que su amigo el millonario, según él, carece de ese carisma. Pero no podía estar más equivocado. Todas las empleadas del centro comercial están coladas por el apuesto Cyrus Waltham.
Monty se fija en una de ellas, Betty, y la invita a cenar. La chica acepta, y pide ir nada menos que al Ritz (pues sabe que allí encontrará a Cyrus). Betty ha acogido en su casa a una amiga que tiene un bebé y no puede pagar su alquiler.
Cyrus tiene una amiga de la infancia, Adela, quien se hace ilusiones respecto a que el millonario un día le proponga el matrimonio. Es con ella y con su madre con quien Cyrus va a cenar al Ritz. Allí coinciden con Monty y Betty. Ésta no deja de mirar a la mesa en la que se encuentra el magnate, ignorando por completo al hombre que la ha invitado allí. Y también Cyrus parece sentirse atraído por la coqueta empleada (en quien hasta entonces no se había fijado)…

En lo sucesivo, se irán desencadenando una serie de malentendidos, en los que también entrará en juego la amiga de Betty a quien ésta ha acogido en un casa junto a su hijo. Molly, la desafortunada madre soltera, está desempleada y no puede pagar el alquiler. Cuando las trabajadoras sociales tratan de llevarse al bebé, Betty interviene diciendo que la criatura es suya, y que puede mantenerla porque trabaja en el centro comercial Waltham. De ahí en adelante, con esa subtrama incorporada, los enredos en torno a Betty, Cyrus y Monty irán aumentando.
El momento culminante llegará durante un viaje en yate, en el que coincidirán los principales personajes…

Comentario
Una grata sorpresa esta desconocida película, sumamente entretenida, y que trata un tema muy en boga en la actualidad, la “ley de la atracción” (particularmente, en el contexto de las relaciones intersexuales). Mucho antes de que naciera Rhonda Byrne, la autora del best-seller “El secreto”, una escritora para mí hasta ahora completamente desconocida como lo es Elinor Glynn publicó un libro sobre ese secreto de marras, llamándolo simplemente “It” (“Eso”).
Nada tiene que ver este “It” con el de la novela de Stephen King y sus correspondientes adaptaciones. Pues en lugar de una película de terror, esto es una comedia romántica. Pero que, lejos de caer en la típica superficialidad del género resulta muy interesante a todos los niveles.
Aunque tal secreto en esta película se limita al tema de ligar, es obvio que solo es parte de algo mucho más grande y profundo, que podríamos denominar carisma. La sra. Glynn, que tiene un cameo en la película interpretándose a sí misma, dice que “eso” es, en pocas palabras, “una gran confianza en sí mismo y al mismo tiempo, indiferencia hacia lo que opinen de uno los demás”. Como vemos por esa definición, el “eso” está más allá de lo concreto y lo tangible; no es necesariamente el conjunto de cualidades que hacen atractiva a una persona, sino algo que las incluye.
Cyrus no es un playboy, pero resulta atractivo para las mujeres sin ni siquiera proponérselo. Su férrea seguridad en sí mismo tiene para las féminas las propiedades de un imán. En cambio su amigo Monty, aunque no peca de inseguro ni de pusilánime, se convierte en el pagafantas de Betty, sin percatarse de que ésta sólo lo está usando. Monty responde al estereotipo de “amigo gracioso”, o para emplear un anglicismo, el “sidekick” humorístico.
El pobre Monty es un pagafantas de manual. Resulta tragicómico ver cómo Betty le trata y se aprovecha de él. Ella es una auténtica femme fatale, que juega con los hombres a su antojo (usando descaradamente a uno y haciéndose la difícil con el otro).
Para ser una comedia romántica es sumamente interesante, pues se aleja de los manidos clichés que proliferan en las películas más modernas de ese género. Nada de cursilerías. El film cuenta sin duda con una gran profundidad psicológica.
La película se consideró perdida durante décadas, hasta que en los ´60 apareció una copia en Praga. Cyrus Waltham está interpretado por el actor español Antonio Moreno, quien siendo muy joven había emigrado a los EEUU, desarrollando allí su carrera cinematográfica. Se convirtió en toda una celebridad del cine mudo, llegando a rivalizar con Rodolfo Valentino. En la etapa sonora del cine aparece en “La criatura de la laguna negra” (Jack Arnold, 1954).